Neumonía: Qué esLa neumonía es un tipo de neumopatía y se trata de una infección aguda en las vías aéreas inferiores de los pulmones. El origen de la enfermedad suele producirse por la bacteria del neumococo pero también puede ser vírico o por hongos.La enfermedad se produce cuando el germen entra en los pulmones y llega a los alveolos por las vías respiratorias produciéndose una inflamación en estos generando pus.Se trata de una enfermedad que afecta principalmente a niños y personas mayores. El tabaco aumenta el riesgo de contraer esta enfermedad.Neumonía: SíntomasLa sintomática dependerá del origen de la infección así como del paciente, pero normalmente suele aparecer: - Fiebre en torno a los 41º- Tos seca y posteriormente grasa- Dificultad respiratoria- Dolor al toser - Malestar al respirarJunto a estos síntomas suele producirse una sensación de:- Fatiga- Vómitos- Náuseas- Dolor de cabeza - DiarreaEn casos extremos, la neumonía puede llegar a generar confusión mental, taquicardia e hipotermia.En caso de niños pequeños, puede existir también dificultad para comer y beber.Neumonía: DiagnósticoCon la aparición de los síntomas, se aconseja visitar al médico que será quien establezca el diagnóstico definitivo.El médico realizará un examen médico que se basa en auscultar los pulmones y en casos más complejos, la radiografía del tórax.Neumonía: TratamientoEl tratamiento se basará principalmente en antibióticos a lo largo de una o dos semanas. En caso de que la neumonía persista, se deberá visitar nuevamente al médico para que prescriba un nuevo tratamiento.Los casos más graves de neumonía pueden llegar incluso a la hospitalización, y suele ocurrir habitualmente a los bebés o las personas mayores.Una neumonía puede llegar a causar septicemia, pleuresía, o absceso pulmonar en los casos más complejos.Neumonía: PrevenciónLa vacunación es la medida más habitual, ya que tiene una eficacia de 5 años aproximadamente. La vacuna se realiza con las cepas del neumococo, conocido como Pneumo 23.